Día Internacional de Conmemoración de las Víctimas del Holocausto
Memoria libre
Ángela nació en 1474 en una familia de sencillos campesinos. Huérfana a los quince años, joven piadosa como terciaria franciscana, su experiencia personal le lleva a crear un grupo de religiosas (la Compañía de Santa Úrsula) dedicada a la formación de jóvenes –especialmente las huérfanas-, y les aconsejaba: ‘Porque hay madres según la naturaleza que, aunque tengan mil hijos, los llevan a todos clavados en el corazón y no les olvidarían ya que el verdadero amor trabaja en ellas’.
Oración colecta
Señor, que no deje de encomendarnos a tu misericordia la Santa virgen Ángela de Mérici, para que, siguiendo sus ejemplos de caridad y prudencia, sepamos guardar tu doctrina y llevarla a la práctica en la vida.
Puedes consultar las lecturas de hoy en lecturas.misa.app.
La noción de comunidad es hoy en día puesta a todas las salsas. Sin embargo, el destino de que provee a sus individuos mide el grado de democracia de una sociedad. Ningún individuo puede definirse por una sola pertenencia “comunitaria”. Identidad y alteridad están íntimamente ligadas. Pero el individuo es el referente absoluto a partir del cual pueden comprenderse la realidad de las fronteras y la necesidad de las relaciones. Una frontera no es una barrera, sino un umbral; entre individuos, entre colectividades, entre lenguas existen fronteras sutiles cuyo aprendizaje permite reconocerse sin alienarse.
Este texto aboga por un existencialismo político para el que la idea de comunidad y de bien común no existe más que en el estado de proyecto. Postula que toda la educación digna de este nombre debería tener por ideal no el enfrentamiento con una sola tradición sino el cruce de fronteras y de culturas.
-Recíbalo mañana*
*Si está disponible.
*Pedidos peninsulares antes de las 17:00h.
Envío gratuito*
*Pedidos +50€ (Sólo Península y Baleares)
Durante el estado de alarma en España no se realizan envíos a Suramérica ni Centroamérica.
-O puede recogerlo en la tienda.
La noción de comunidad es hoy en día puesta a todas las salsas. Sin embargo, el destino de que provee a sus individuos mide el grado de democracia de una sociedad. Ningún individuo puede definirse por una sola pertenencia “comunitaria”. Identidad y alteridad están íntimamente ligadas. Pero el individuo es el referente absoluto a partir del cual pueden comprenderse la realidad de las fronteras y la necesidad de las relaciones. Una frontera no es una barrera, sino un umbral; entre individuos, entre colectividades, entre lenguas existen fronteras sutiles cuyo aprendizaje permite reconocerse sin alienarse.
Este texto aboga por un existencialismo político para el que la idea de comunidad y de bien común no existe más que en el estado de proyecto. Postula que toda la educación digna de este nombre debería tener por ideal no el enfrentamiento con una sola tradición sino el cruce de fronteras y de culturas.